En una charla anterior que se titulaba “el cuerpo mi primer casa para habitar “ hacíamos un enfoque holístico del cuerpo, quiere decir que no somos solo el funcionamiento fisiológico del cuerpo , Sino que somos una integridad  cuerpo-mente-afectos.

El cuerpo es nuestro modo de ser y estar en el mundo el modo de vincularnos y relacionarnos. Donde vive nuestra mente si no en el cuerpo o donde viven los afectos si no en el cuerpo. Por lo tanto somos una unidad indivisible como la torta de chocolate, donde la torta y donde el chocolate? 

Atravesados por la cultura hemos dado prioridad a la mente como conductora y manipuladora de nuestras vidas, dejando postergados los afectos, yo diría que estamos atravesando  entre los 3 a 5 o 6 años afectivos. Quedamos en lo primitivo de nuestra infancia que a diferencia de los berretines  y enojos de niños tirando o rompiendo cosas, como adultos que somos hacemos guerras y tiramos bombas, nos encaprichamos cual infante en  jugar a la rebeldía de la  oposición lejos de las etapas de madurez que hoy debiéramos tener por el avance de la ciencia.